Un ¿país? de locos.

Ayer, jueves 4 de septiembre, se celebró el juicio contra los cuatro activistas antitaurinos que el 15 de junio saltaron a la arena de la plaza de toros Monumental de Barcelona con pancartas y que debieron ser rescatados por los Mossos d’Esquadra para no ser linchados cuando los asistentes empezaron a propinarles patadas y puñetazos.

Los agresores aún no han podido ser identificados ya que, misteriosamente, las cintas de seguridad (obligatorias en este tipo de actos) han desaparecido. También (...sigue el misterio) no existe toma alguna de la agresión por parte de Canal+ (que retransmitía esta salvajada en directo). La Subdelegación del Gobierno en Barcelona además de la Coselleria de Interior del Govern de la Generalitat mantienen dos investigaciones abiertas aunque, por extraño que parezca, la Justicia se ha adelantado demostrando una inusual celeridad.

A los activistas se les imputa una falta administrativa leve y tendrán que pagar 120 euros aunque, siempre hay un alma caritativa como la que ha aportado en el juzgado un vídeo casero en el que perfectamente se recogen las tomas de la agresión. En la mencionada cinta pueden identificarse perfectamente a los agresores y, al parecer, trata de un apoderado, de dos banderilleros y de uno (con cara de animal) que debe ser el que se encarga de abrir la puerta de toriles. Lo asombroso es que también se aprecia a un "aficionado" que saltó al ruedo y al que, además de la correspondiente multa por daños y agresión, le tendrán que "colocar" otra sanción administrativa de 120 euros.