Ni más ni menos. Aunque les suene raro, han visto las orejas al lobo: La Guardia Civil pide a los mineros que usen medios pacíficos. O sea, ¿que se sienten con una pancarta para que vayan ellos con porras y pelotas de goma a hacer su "trabajo"? Pues, han mordido hueso.
Las asociaciones profesionales de guardias civiles Unión de Suboficiales (USGC) y 'Guardias Civiles para la Democracia – GCpD' han expresado su profundo malestar "por las protestas del sector minero asturiano y leonés, que han dado lugar a lesiones en guardias civiles y policías nacionales encargados del orden público".
En un comunicado público USGC y GCpD "respetan profundamente la Constitución, y se expresan a favor del derecho de manifestación y de huelga recogidos en la Carta Magna, mas si se están atropellando unos derechos de los trabajadores, con los recortes que estamos sufriendo todos los españoles con esta crisis que nos envuelve y, sobre todo, por los más que drásticos recortes en las ayudas al “carbón” que sufre el colectivo minero de Asturias y León".
Además advierte que "es loable que utilicen herramientas democráticas para reclamar su derecho al trabajo y desde USGC y GCpD somos sensibles con el problema laboral que están sufriendo estos trabajadores". Ésta es buena, más viniendo de quiénes utilizan "herramientas tan democráticas" como la práctica de darle leña al que se mueva.
"Lo que no podemos entender de ninguna de las maneras son los violentos medios que están utilizando estos trabajadores en sus reivindicaciones. No compartimos de forma alguna los cortes de carreteras indiscriminados, el bloqueo de las vías férreas con barricadas (con resultado de un pasajero herido grave), así como tampoco el lanzamiento de objetos contundentes y altamente lesivos e incluso materiales pirotécnicos sobre los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, poniendo en concreto peligro su integridad física e incluso sus vidas, sin olvidar que también están realizando su trabajo, que no es otro que el mantenimiento del Orden Público", sentencian ambas asociaciones profesionales.
Las asociaciones profesionales de guardias civiles recuerdan que este conflicto no es entre mineros y fuerzas de seguridad del Estado, por lo que les pedimos "que cesen en los ataques, más cerca de actos vandálicos que de protestas laborales, a los que nos están sometiendo y que pueden desembocar en tragedia de mantenerse en el tiempo". "Su lucha, al fin y al cabo, es la lucha de todos los trabajadores, y para ello deben de utilizar, exclusivamente, las acciones que la Ley les permite sin incurrir en ilícitos penales", sentencia el comunicado.
Pues nada, cuando vayan ellos con las manos en los bolsillos, quizás se encuentren con la misma actitud en el colectivo minero. Mientras tanto, defienden sus legítimas reivindicaciones y, cuando les apalean, pues, sencillamente, se defienden.
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