EL REY ENCUBRIÓ A SU YERNO Y ESO ES DELITO.

Duro (como ha de ser) y argumentado Post del senador jeltzale Iñaki Anasagasti.

Todo lo que estamos sabiendo de las andanzas del yerno del rey, Iñaki Urdangarin, son tan graves que al final comienzan a salir a cuentagotas. Pero ya se sabían. En el libro "Una Monarquía protegida por la censura" parte de éstas andanzas las conté y de ahí que al original, que llegó a la secretaría del rey, se le denegó la autorización para su publicación y la "Esfera de los Libros" se plegó a aquel abuso de poder.

Con semejante mentalidad y sabedores de las fechorías del yerno, de repente en el año 2006 le obligan a dejarlo todo, le consiguen un puesto de Consejero de Telefónica y lo mandan a Washington. Es decir, la Casa Real sabía de pe a pa, sobre los supuestos delitos del esposo de la Infanta Cristina. Si no, de qué le iban a enviar a Washington con semejante palacete en Pedralbes. Y a eso se le llama encubrimiento, penado como delito en el Código Penal. Pero ya se sabe. El rey no responde ni ante la justicia española, ni ante la europea, ni ante Dios, ni ante la historia. Y es de esa impunidad de la que han salido las corrupciones del yerno. De lo que veía en Casa, de la manera de proceder de unos y de otros y sobre todo de la impunidad con la que se movían.

Destapado el caso veremos si nos obsequian con esa tarjeta de navidad escrita en castellano, inglés y francés con la que regalaban al personal cada navidad. Ni si en Nochebuena van a estar juntos, ni si ya están trabajando con Federico Trillo para tratar de amortiguar el golpe. Si lo hacen, tanto el PP como ésta Casa Real estará condenada a muerte. Por corrupción parecida cayó el abuelo Alfonso XIII. Que jueguen con fuego.

Y es que los duques de Palma acumularon en cuatro años bienes inmobiliarios por valor de 7,3 millones de euros. La joya de la corona es el palacete de Pedralbes, donde vivieron Iñaki Urdangarin y Cristina de Borbón hasta su traslado a Washington, valorado en 6 millones de euros.

DINERO PÚBLICO Las sociedades vinculadas al duque de Palma ingresaron una ingente cantidad de dinero procedente de las Administraciones públicas -5,9 millones- que les permitió lucrarse a través de técnicas de ingeniería financiera por las que, además, pagaban menos impuestos.

La Agencia Tributaria, como informó Público, ha destapado las operaciones oscuras de Urdangarin en un informe de 148 páginas que ya ha remitido al juez del caso Palma Arena, José Castro. El documento respalda la afirmación del magistrado de cómo el duque -presidente del Instituto Nóos hasta junio de 2006- y el ya imputado Diego Torres -su socio y su sucesor en la presidencia de la entidad- urdieron una trama empresarial para "apoderarse" de fondos públicos. Pero Hacienda también descubre que el segundo objetivo de Urdangarin y de su círculo era pagar menos impuestos.

En definitiva, una vergüenza. Y de ejemplaridad nada de nada.