Filo-franquistas contra el aborto... contra los referéndos... contra todo.

O sea... "a favor de la vida". Esto sí parece interesar a este sector del Partido Popular (el ultra) así como a cierto sector de la Iglesia (en el que se encuadran fachas reconvertidos en cardenales y obispos "bautiza-infantes"). Desde luego, ni a unos ni a otros parecen interesarles lo más mínimo otras muertes, como los cadáveres sin desenterrar en centenares de cunetas de caminos... "Eso es el pasado"... del que ni se avergüenzan, ni condenan. Simplemente les conviene pasar página y borrarlo de su conciencia.

De un personajillo políticamente impresentable como Mayor Oreja, uno se puede esperar cualquier cosa con tal de figurar. Así, ha anunciado que acudirá a la manifestación contra el Aborto siendo, de paso, el primer dirigente del reducido grupo del Comité de Dirección del Partido Popular que anuncia su presencia directa en ese acto, aunque su líder, Mariano Rajoy, quien no acudirá, animó a los militantes a que acudan, en el discurso que pronunció el pasado lunes ante la Junta Directiva Nacional. Otros dirigentes populares como la portavoz parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría, ya han anunciado que no irán, alegando motivos de agenda, secundando -de este modo- al perceptor de trajes Camps.

Jaime Mayor Oreja justificó ayer su presencia en la manifestación porque se trata de unos de los asuntos claves para el futuro de la sociedad española. En este sentido calificó de "aberración" que el aborto pueda ser considerado un derecho, subrayando que ese es el tema central y lo demás únicamente "subterfugios que alejan el debate de su auténtica y profunda dimensión". El dirigente popular reiteró que la crisis que se vive en el mundo occidental es de valores.

Lo que uno ya no llega a comprender (aparte del auténtico "rostro" que le echa este individuo a la vida) es qué entiende mayor por "aberración", qué es lo que entiende por "derecho" y que entiende por "valores". De lo que sí estoy seguro que entiende, y de sobra, es de "subterfugios".

Un personaje que avala el franquismo y (lo más grave) se jacta de ello, no creo que sea la persona más idónea para hablar del derecho a la vida ni balbucear con el término "valores". Debe comprender que más de una embarazada recibió un tiro y fue enterrada en una cuneta (junto a su feto). Luego, los franquistas que tanto anhela ejercieron el aborto, por cojones... pero el aborto.

A esto, semejante mequetrefe político le llama "clima de placidez" y cundo alguien le denuncia (como este Editor), tienen que ser tres los Magistrados que le dejan "irse de rositas" apelando a su libertad de expresión. Luego, claro, diría que yo también la tengo por poder escribir esto, pero no vamos a comparar a semejante macacocito con un hombre hecho y derecho como yo, aunque, judicialmente, tendría las de perder... a priori.

En fín, es sabido que hacer un tipo de apología del terror o del terrorismo está consentida y otra está castigada. No se pude autorizar manifestaciones falangistas a las que los convocados acuden con banderas a-constitucionales o pre-constitucionales (de todas formas, ilegales), cuando se detiene y condena al portador de una bandera de ETA o de un simple retrato de un familiar preso. Es muy difícil de entender por qué se castiga con extrema dureza hacer una pintada con la serpiente y el hacha y se pasa por alto una pintada a favor del GAL o de simbología ultraderechista... incluso destrozar monumentos de las "otras" víctimas, las que, al parecer, no existen... las no "oficiales o "profesionales".

A todo esto, Mayor, aplaudiendo con su segundo apellido en plural y, Rubalcaba mintiendo -para variar- de manera compulsiva. No se debe olvidar que, para éste último, el GAL no ha existido nunca... y así de categórico llegó en su día a expresarse ante las cámaras de televisión...