Kalimotxo: Denominación de Origen

No tenemos que ir muy lejos para encontrar el lugar de origen del kalimotxo. La famosa mezcla de vino tinto con refresco de cola que arrasa, sobre todo en los más jóvenes, fue descubierta en el barrio de pescadores del Puerto Viejo de Algorta (Bizkaia).

El kalimotxo, bebida popular que consiste en mezclar vino tinto con refresco de cola, es uno de los indiscutibles reyes de los botellones. Su origen, y la identificación de sus inventores, han dado lugar a muchas especulaciones y teorías, pero la verdad es que, esta vez, toca barrer para casa. El kalimotxo, para sorpresa de muchos, se inventó en tierras bizkainas: para ser exactos, en el Puerto Viejo de Algorta. Al menos, ésta es una de las teorías que más fuerza tiene.

Todo comenzó un caluroso 12 de agosto de 1972, en las famosas fiestas de la localidad de Getxo. La comisión nombraba cada año a una cuadrilla que se encargaba de la única txosna que había en las fiestas. Ese año, le tocó por primera vez el turno a los jóvenes de Antzarrak. "Era la única txosna que había, con la que teníamos que recaudar el dinero para pagar las fiestas. El Ayuntamiento sólo ayudaba con 75.000 pesetas, pero el presupuesto total ascendía a los 3 millones", comenta Agustín Martínez, "Tintxu", miembro de la cuadrilla, que en aquella época contaba con sólo 17 años.

Para poder conseguir el dinero restante, los jóvenes encargaron a unas bodegas de Oion (Araba) 2.000 litros de vino cosechero embotellado al precio de 16,50 pesetas y botellas de plástico, estas últimas para acallar las quejas de los vecinos que, año tras año, protestaban por la cantidad de botellas rotas con las que el Puerto Viejo amanecía en fiestas.

Instalaron una barra de madera en Etxetxu, y esa mañana recibieron el encargo de las bodegas. "Ese día hacía mucho calor, y el vino terminó por picarse. Los txikiteros nos pedían vino y casi sin beberlo, pagaban y se iban, hasta que uno finalmente nos confesó que estaba picado", añade Josu Elorriaga, otro de los componentes de la cuadrilla.

Debido a que buena parte de las fiestas se financiaba con ese dinero, se vieron en una delicada situación, a la que tenían que buscar una solución rápida. "No podíamos comprar más vino; éramos unos chavales que nos vimos realmente en un apuro. A alguien se le ocurrió mezclar el vino con diferentes refrescos y, al final, triunfó la Coca-Cola". "Nos agenciamos una bañera con barras de hielo grandes en el interior y dentro de ella mezclamos el vino con el refresco. De ahí cogíamos los vasos y botellas para vender". Los que lo bebían aseguraban que esa mezcla ya existía anteriormente, que se llamaba Rioja Libre, pero que la mezcla de los jóvenes tenía un sabor un tanto diferente. "Claro, es que el vino estaba picado".

Después de conseguir la cantidad de cola necesaria para que no se apreciase el sabor del vino picado en la mezcla final, comenzaron a buscar un original nombre para la novedosa bebida. "Solíamos llegar a la txosna pronto para preparar todo, porque el almacén estaba lejos de ella y nos llevaba su tiempo. Dos amigos de Erandio aparecieron tarde en el lugar. A uno de ellos lo apodábamos Kalimero, y el otro era bastante feúcho. Alguien comentó que feo en euskera se decía motxo. Comenzamos a conjugar las dos palabras y de ahí salió el nombre". "Kalimotxo es la palabra más famosa de procedencia de pueblo". Casi sin quererlo, el kalimotxo comenzó a hacerse famoso y a cruzar fronteras.

"Al acabar las fiestas, a muchos de nosotros nos tocaba ir a la mili. Y ahí, nos encargamos de extender el invento, dándolo a conocer por todo el Estado". En 2001, la cuadrilla Antzarrak publicó un libro, El Invento del Kalimotxo y anécdotas de las fiestas, donde se confirmaba la teoría de que la mezcla tenía Denominación de Origen: el Puerto Viejo. De esa manera, la fama de Antzarrak no hizo más que crecer.

"Una vez, estando yo en Barcelona, recibí una llamada de Radio Euskadi. Lo primero que pensé era que me llamaban por algún tema del Getxo Rugby Artea, ya que ahora soy presidente del mismo. Y... ¡no! Sabía que mis compañeros estaban trabajando en el proyecto del libro, pero no me imaginaba que tendría tanta influencia mediática", recuerda Tintxu entre risas. Después de 1972, muchos han intentado hacerse con el copyright de la conocida mezcla. "Una cuadrilla de Nafarroa alegó que fueron ellos los que habían descubierto la bebida en el año 1979. Sólo tuvimos que enseñarles el libro donde aparecía la foto de uno de los nuestros proclamado Miss Kalimotxo en las fiestas del año 1975. Se callaron", comentan los ya no tan jóvenes miembros de Antzarrak.

"Es una palabra que todo el mundo ha querido inventar; incluso cuadrillas del Puerto Viejo querían hacerse con el invento", añade Elorriaga. "De hecho, Coca-Cola se ha hecho con el copyright de la mezcla, y de las palabras relacionadas con ella, como kalitxiki", informa. Lo cierto es, que, aunque muchos quieran hacerse con el invento del famoso Kalimotxo, que arrasa allá por donde va, los verdaderos Aitas del kalimotxo fueron unos jóvenes que, con las ganas de salvar unas fiestas de la ruina, y con el ingenio de su edad, inventaron la mezcla secreta y su nombre oficial, haciendo así del 12 de agosto de 1972 el día del nacimiento del kalimotxo.

Jon Iñaki Rodríguez, "Kalimero", hoy en día vive en Erandio con su mujer y sus dos hijos. En 1972, era uno de los amigos de la cuadrilla organizadora de las fiestas Antzarrak, y primo de uno de sus componentes, Imanol Elosegi. "La historia de mi apodo es sencilla. Por esas fechas, tuvo lugar en Sopelana un campeonato de pop cross de Citroën. Uno de mis primos de Barcelona era el organizador y lo acompañé . En el evento se usaban unos gorros al estilo del dibujo animado 'Kalimero'. 'Katilu', de Antzarrak, me vio con uno y empezó a llamarme así".

Cuando los jóvenes dieron con el invento, utilizaron el mote de Jon para crear un nombre atractivo. "Nunca lo he ido pregonando por ahí. Hace un año aproximadamente se lo conté a mis hijos, y mi cuñada se enteró por casualidad haciendo un reportaje del kalimotxo en Getxo Irratia". Han pasado muchos años desde aquel 12 de agosto, y 'Kalimero' lo recuerda nostálgico. "En aquella época quién iba a pensar que la mezcla y su nombre acabarían siendo tan conocidos. Fue todo una casualidad. Pero todo el mundo sabe que los grandes inventos se descubren por casualidad".

FUENTE: I.O. para DEIA, Diario de Noticias de Bizkaia, 24.08.09 "El vino se picó y a alguien se le ocurrió mezclarlo con refrescos. Triunfó la Coca-Cola"