Si gracias a un golpe de Estado contra el régimen legítimamente establecido, el "Generalísimo" (1) Franco "gobernó" 40 años, hoy se cumplen 40 años desde que Juan Carlos I prometiese fidelidad al primero convirtiéndose -de esa forma- en su heredero.
Sin embargo, 40 años después, la realidad se más compleja ya que las voces críticas con la monarquía van aumentando de forma progresiva: el Publiscopio de diciembre de 2008 desveló que el 58% quiere volver a decidir entre Monarquía o República, porcentaje que en 1.988 se cifraba en un 31%.
Lo cierto es que, a sus 71 años, Juan Carlos ni siquiera se plantea ceder el testigo a su hijo para ayudarle a consolidarse como rey. Y la reforma constitucional para acabar con la discriminación de la mujer en el orden sucesorio está paralizada sine die. En ambos casos subyace el peligro, alimentado por sectores republicanos y aceptado tácitamente por los monárquicos, de que abrir un melón aparentemente inofensivo aliente el debate sobre la Monarquía misma. O sea: su salud no sería tan buena.
A esto se debe añadir que la Constitución de 1.978 blinda la Monarquía ya que hace prácticamente imposible pasar de Monarquía a República. Teóricamente, incluye la posibilidad, pero exige requisitos mucho más duros que para los demás artículos. La reforma exigiría el apoyo de 2/3 en ambas Cámaras, cuando la mayoría exigida para el grueso de reformas es de 3/5. Pero la dificultad es mucho mayor: a continuación, deberían disolverse las Cámaras, convocarse elecciones y lograrse de nuevo 2/3 de apoyos en el Congreso y el Senado. El último paso sería convocar un referéndum. Ninguno de estos pasos puede saltarse.
Como se ha expuesto anteriormente, es el mismo blindaje el que dificulta la reforma, presentada como técnica, de acabar la discriminación de la mujer en el orden sucesorio. Los criterios están detallados en el Título II, que regula la Corona y cuya reforma está blindada. La posibilidad de una Iniciativa Legislativa Popular no es aplicable a la Corona, como tampoco a las leyes orgánicas.
Como opina el senador Iñaki Anasagasti, "Si hubiera libertad de expresión, la Monarquía no duraría ni diez minutos".
(1) Comenta un lector: Existe por ahí una teoría interesante que creo que deberías conocer. El nombre de Generalísimo que adoptó Franco ya dió que hablar en su día y horrorizó a otros de los generales golpistas por la concentración de poder que suponía.
Pero puede que el origen de la decisión de tomar semejante título no procediese de Franco y su camarilla.
Como ya es sabido Franco fue todo el tiempo un agente de Canaris, el jefe del Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas alemanas. Parece ser que fue el mismo Hitler quien exigió que Franco tomase el título de Generalisimo.
¿Por qué? muy sencillo:Ya hubo otro Generalísimo, Godoy, que tomó este título para conducir la Guerra de las Naranjas, ordenada por Napoleón para sacudirle a Portugal. Para Hitler era una forma de emular a Napoleón y dejar claro a los golpistas, a dónde conducía la correa que Franco llevaba al cuello.
FUENTE (De Referencia): Diario Público.
OPINIÓN POLÍTICA LOCAL, NACIONAL, REGIONAL, ESTATAL E INTERNACIONAL. EL UNIVERSO DE HERGÉ: TINTÍN. ATHLETIC CLUB DE BILBAO: OPINIÓN. ACTUALIDAD. MISCELÁNEA. HISTORIA. CIENCIA POLÍTICA. SOCIEDAD. COSAS DE BILBAO. COLABORACIONES. LIBROS. CINE Y MÁS.....
Ongi Etorri - Bienvenue - Bienvenido - Welcome - Benvingut - Benvido -Benveniu - Benvenuto - Willkommen - Boa Vinda - Yookoso - Karibu - الصحة - Bine ai Venit - Bem Vindo - Välkommen - Velkommen - Irashai - Добро - пожаловать - Welkom - Välkommen - רוך הבא/ ברוכה הבאה/ ברוכים הבאים - Καλώς ήρθες - Vítejte - Dobrodošli - Fáilte, Tá fáilte romhat - स्वागत - خوش آمدی! / خوش آمدید! - Deuit mad deoc'h - Wolkom - Ласкаво просимо - ยินดีต้อนรับ - Kaj Bonvenon Ankaŭ - Fiţi bineveniţi - Witaj - Tervetuloa.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario