El Vaticano, de la mano de su "nuevo guía" (el anacrónico Joseph Ratzinger, o "Ger" Ratzinger I, o Benedicto XVI... o Benemérito de la 16ª Comandancia) ha aprobado una disposición para que los fieles reciban la comunión en la boca y de rodillas, a la manera "tradicional", ya en "desuso".Uno no sabe ya que pensar. ¿Echarán alcohol en el Santo Cáliz? ¿Se desmadran en orgías en plan Borgia? o... ¿son las Hostias con gluten?
Lo cierto es que, esta especie de retrógrados que han posicionado a un "fan" del mismísimo "Hítler", empiezan a nombrar a toda la recua del Opus y, así pasa lo que pasa: Iglesias vacías, otras sin sacerdotes, otros curas cubren 5 ó 6 Templos, Rouco Varela adoctrinando a un Estado constitucionalmente laico. ¿O para esto no vale la Constitución española y sí vale para impedir la voz del Pueblo Vasco? ¿Qué pasa: que al embajador español ante la Santa Sede -y antiguo alcalde socialista de A Coruña- le han contado lo del "Plan Ibarretxe" para que el papa-facha nombre a Iceta en contra del sentir generalizado de la Iglesia Vasca? Tampoco pasa nada...Blázquez quería hacernos a todos palentinos, eso sí, con esa voz tan fina como la de los niños de la coral.
Pues bien, visto lo que pasa entre curas y niños (sólo nos remitiremos a las Archidiócesis de California o a la de New York), mejor que "pasen" de ponerse de rodillas, agachados o con dar nada en la boca. Pero, nada...nada.
Si Jesucristo levantase la cabeza... lo del látigo con los mercaderes iba a ser un cuento de niños. Y, si yo le tuviese -humildemente- a mi lado... pues voy y cojo otro látigo.
Entiendo que, a alguien, le puede parecer bastante fuerte lo que escribo... o bien cómo me expreso, pero, como dice un nuevo miembro de la renovada cúpula del P.P. (y del Opus, y ex-Presidente del Congreso, y ex-Ministro de Defensa, a la sazón responsable de los militares fallecidos en el "accidente" del Yakolev-42), es que... "manda güevos".
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