«Por obligación y no por devoción», pero el alcalde de Bilbo, Iñaki Azkuna, acata la sentencia del Tribunal que obliga a que la rojigualda ondee diariamente y permanentemente en la balconada del Consistorio.
Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) obliga al Ayuntamiento de Bilbao a izar la bandera española en el edificio consistorial para que ondee a diario, de forma permanente y «en un lugar preferente», como símbolo ante los ciudadanos de «la nación, signo de soberanía, independencia, unidad e integridad de la patria».
El fallo de la Sala de lo Contencioso Administrativo, fechado el 30 de noviembre y difundido ayer, es firme y no cabe recurso alguno. El Alto Tribunal afirma que la ikurriña y la rojigualda deberán estar presentes en la fachada del Ayuntamiento todos los días del año y desestima así el recurso de apelación que había interpuesto el Consistorio contra una sentencia del Juzgado de Instrucción número 4 (de los de Bilbao) de abril de 2005, en la que se atendía una denuncia que había planteado la Abogacía del Estado para que en Bilbao se cumpliera con la ley que regula el uso de las banderas.
En su argumentación, la Sala rechaza la alegación de la defensa del Ayuntamiento de que la ley ya se cumple al izar la rojigualda en la balconada el viernes de la Aste Nagusia, en cumplimiento de un acuerdo municipal del Pleno de julio de 1998. Tras conocerse la resolución del TSJPV, el alcalde, Iñaki Azkuna (PNV), dijo que la acata «por obligación y no por devoción» y «como no puede ser de otra forma en un Estado de Derecho, en el que la Justicia manda».
Sin embargo, agregó que su «espíritu no está en favor de colocar ninguna, porque las todas las banderas del mundo traen problemas». Concretamente, habló de «confrontación, y Euskadi no es una excepción». En un emotivo acto de homenaje al que fuera último alcalde de Bilbao antes del golpe de Estado fascista por parte del "generalillísimo" Franco, consideró que la sentencia será «aplaudida por algunos y rechazada por otros», pero, a su entender, la mayoría de los bilbaínos, que «son gente sensata», tendrán «mayores preocupaciones que el poner la bandera o no». No obstante, si surgen problemas a consecuencia del fallo, Azkuna indicó que vendrán de la mano de «algún exaltado de uno u otro signo, de banderizos» que él «lanzaría a la ría o montaría en una gabarra para mandarlos a alta mar», porque se puede «querer una bandera sin odiar las demás». Y, es precisamente ese sentimiento liberal el que lleva a nuestro alcalde a insertar esquelas de tenientes de alcalde franquistas.
Desde mi punto de vista, creo que habrá cien mil problemas antes de volver al cansino tema de "la guerra de banderas". Desde luego, yo no me siento representado por la bandera española y sí por la vasca. Como yo, la mayoría de los ciudadanos (según las urnas).
¿Que existe otro considerable cuerpo electoral que optaría por izar la rojigualda? Sin duda eso es cierto y, al paso que vamos, tendremos que instalar otros mástiles para la enseña ecuatoriana, la colombiana, la rumana o la senegalesa. Y, esto, no lo digo por decir ya que, de una forma legalizada, pueden llegar a formar parte del cuerpo electoral en lo que a Comicios municipales comporta.
Sin ir más lejos, yo mismo pude comprobar en un municipio tinerfeño todo tipo de señalización viaria en alemán y, ello, porque esos ciudadanos asentados en ese lugar, una vez constituidos en candidatura independiente, obtuvo la mayoría consistorial.
Con este caso en la mano, ¿deberían ondear la bandera germana en el Ayuntamiento? Sinceramente opino que no aunque creo que, evidentemente, esa gente se sienten alemanes y no españoles. Y, así me siento yo, vasco y no español por lo que la bandera de España a mí no me dice nada, no la siento, no me representa...
Yo -al igual que Azkuna-tampoco soy "banderizo" pero, es cierto que eso de los colores se lleva por convicción en el corazón y no por imposición en un mástil.
Volviendo a lo acaecido, antes de conocer la posición del alcalde, en el "lunch" posterior al breve pleno en el que se desestimaron las reclamaciones de EAE-ANV sobre las cuentas públicas y se aprobó definitivamente el presupuesto para 2008, explicaron su postura sobre la sentencia los ediles Antonio Basagoiti (PP), Txema Oleaga (PSE) y Julia Madrazo (IU).
Basagoiti señaló que sirve para «acabar con la mentira histórica, social y política de que Euskadi no es España», y el portavoz del PSOE confió en el «sentido democrático y sensatez» de Azkuna para cumplir el fallo. Por su parte, La "trepa" Madrazo (IU) afirmó que su bandera hubiera sido «la de Bilbao, la de la paz y la de la República» (verborrea de todo a 100).
De forma especial, a Julia Madrazo (que no estaba en el homenaje a Ernesto Ercoreca) le diría aquéllo de más hacer y menos decir, ya que, en definitiva, proviene de Izquierda Socialista. A ver si es capaz de dar ese empujón que le falta a Azkuna para hacer otra "azkunada" que, en tal caso, aplaudiría desde estas líneas.
Por resumir, ¿por qué no izar una bandera republicana (que es tan española como la monárquica) alegando a que fue despojada del mástil consistorial por la fuerza? De esto ya estuve hablando con un amigo, blogger (y senador del año) en el acto-homenaje al citado alcalde de Izquierda Republicana, Ercoreca.
FUENTE: Diario GARA y propias del Editor.
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