LE DAN A LA ROJA Y NO A EDURNE UN PREMIO A MAYOR GLORIA DE LA HISPANIDAD‏.

Suscribo todas y cada una de las palabras expresadas por Iñaki Anasagasti en su Blog: No te preocupes Edurne. No te pierdes nada. Pep Guardiola, tan listo y coherente como tú, les salió por peteneras. Se lo querían dar hace dos años y les dijo que cuando cumpliera sesenta.

Pero eso a la Fundación Príncipe de Asturias no le interesa. Solo trabajan con glorias de relumbrón porque el Premio no te lo darían a ti, Edurne Pasaban, sino al hijo de su padre, Felipe de Borbón, estrella luminaria de un montaje supermillonario hecho con dinero público e imposible de controlar democráticamente. Y eso que el tal señorito no consta para nada en la Constitución, salvo cuando muera su padre.

Y se la dan a La Roja con una argumentación deleznable y desconociendo los miles de millones que ganan estos consagrados. A ti lograr los catorce ocho miles te ha costado te amputen los dedos de los pies, no hayas podido tener una familia estable, ver morir a tu lado a compañeros del alma, comprobar cómo la coreana Oh Eun-Sun te lo quitaba sin haber logrado lo que tú, pero tienes tres defectos: eres vasca, de Tolosa, hablas euskera, y eres mujer y los once son hombres, millonarios y llevan el nombre de España en el dorsal. Puedes competir con las brumas del Everest o con los hielos del Annapurna o con toda Corea, pero no con un jurado lleno de mayordomos de la hispanidad, de la monarquía impuesta por el dictador, y de gentes que creen que el fútbol es lo máximo de lo máximo, nunca el alpinismo.

Se ha hecho público que ninguna universidad española figura entre las 200 más importantes del mundo, pero en Madrid están felices porque han ganado el campeonato mundial de fútbol, el Tour de France, y no sé cuantos campeonatos de tenis y no sé cuantas cosas, pero en formación universitaria España no destaca en nada si no es por lo mal que se considera la educación en la piel de toro. Y el alpinismo, el hombre y la naturaleza en combate, no es valorado, aunque hayas tenido que buscarte tu sponsorización y hayas tenido que habitar en cuchitriles inmundos. Pero lo importante es la Roja y nada más que la Roja.

Y sobre todo un premio que lleva el nombre de Príncipe de Asturias para ir creando costumbre con la parejita. En el siglo XXI la jefatura del estado no se escoge por mérito alguno sino porque este señor es hijo de su padre después de haber ninguneado a sus otras dos hermanas, mayores que él. Y todos reverenciándole y jaleando un premio a mayor gloria de estos dos grandes figuras no democráticas que viven del erario público. Pero esa es la España cañí subvertida de valores en la que vivimos. Por eso querida Edurne, nunca tuviste el menor chance de ganar ese tan desprestigiado premio alimentado con dinero público y cercado por gentes que jamás premian al que empieza o al desvalido, solo a los grandes consagrados.

Pero tú Edurne, aguanta el tirón. En peores borrascas te has visto envuelta y haz como haría Juanito Oiarzabal: mándales a la mierda. Sobre todo a ese jurado de gentecilla que usa dinero público y no lo deja controlar. Un jurado que usa el nombre de Asturias para premiar a once millonarios que ganaron un partido en la prórroga.

Pero eso es el premio Príncipe de Asturias. Te lo podían haber otorgado ex aequo, pero emborronarías la imagen de un señorito Borbón y su plastificada esposa que encima es del Atlético de Madrid, y se jacta de ello, cuando debería, por lo menos, guardar las formas.
Zorionak! Edurne por tus catorce ochomiles. Lo único que te pido es que les solicites a estos millonarios que el premio que les van a dar con dinero público, lo dediquen a alguna Fundación Asturiana que se dedique a la Memoria Histórica de una región que jamás fue monárquica y que Franco machacó a raíz de la revolución de octubre de 1934.

Y encima, el mismo día, en Argentina, les ganan cuatro a uno. A lo que yo, añadiría: "¡Que les den!".