Por mucho que Chaves se auto-engañe (y pretenda engañar a l opinión pública) diciendo que: "El referéndum por la independencia de Cataluña es propaganda" y por mucho que el mencionado ministro de Cooperación Territorial, declare a la radio pública española que "esta consulta ni siquiera merece la pena de que se le llame referéndum, son actos de propaganda política por parte de partidos independentistas y nacionalistas", lo cierto objetivo es que El 'sí' gana en las consultas soberanistas con el 94,9%.E, idependientemente de la trascendencia política del hecho en sí mismo, se puede constatar una transcendencia internacional. En cuanto a la primera, los partidos políticos catalanes que apoyan la consulta (CDC y ERC), destacan precisamente esto -la trascendencia política del referéndum- y consideran el mismo como un "aviso" de la "democracia" catalana. Así, desde CDC optan por valorar ese tipo de convocatorias como una oportunidad para "levantar la voz" ante la "incomprensión de España".
En lo referente a la segunda vertiente (la transcendecia internacional), cabe reseñar que,nada menos, que una docena de Medios de Comunicación internacionales cubrieron la consulta sobre la independencia de Catalunya en Osona, la comarca con más consultas. Entre los 187 periodistas acreditados en la capital de la comarca, figuran corresponsales de medios británicos, como la BBC y el Finantial Times; franceses, como Le Monde, Libération y La Croix; el mejicano El Proceso; el noruego Sami Press, y el holandés Volkskrant, entre otros como alemanes, italianos, norteamericanos, vascos o galegos.
Además, diversos medios europeos destacan el poder simbólico de la consulta, y la vinculan dentro del auge del sentimiento nacionalista en Catalunya a la espera de sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut. Sin ir más lejos, el Diario parisino Le Monde achaca el aumento del independentismo a la "configuración política inestable" de la Generalitat en una editorial, y la BBC destaca que "la consulta se produce en un momento de 'tensión' con Madrid por la sentencia y por 'frustraciones' económicas e identitarias".
Volviendo al "vocero oficial del Gobierno español" (el día del Referéndum, en funciones de turno de guardia), el vicepresidente tercero del citado Gobierno, ministro de Política Territorial y destacado dirigente del PSOE -Manuel Chaves-; podemos decir que la legitimidad en cuanto a la veracidad de sus datos es del todo cuestionable. Máxime cuando llego a aprobar (dos meses y medio antes de abandonar la Presidencia de la Junta de Andalucía) una subvención de casi 10,1 millones de euros para una empresa (MATSA) de la que es apoderada su hija, Paula Chaves Iborra.
Lo realmente curioso es que ni el propio Chaves ni su hija han llegado a desmentir jamás las declaraciones que en su día efectuó el apoderado de la citada empresa. A partir de aquí, y a sabiendas de que Chaves -por regla general- quizás ni se llame Manuel, no es la persona más indicada para hablar de veracidades. Y, no sólo por MATSA, sino que es conocedor de primera mano de asuntos ta turbios como MATESA, FILESA, Time Sport, BOE, Expo de Sevilla, AVE, utilización de despachos públicos por parte del hermano de su íntimo (Alfonso Guerra), y, en definitiva, un considerable etcétera.
Y, si nunca ha reconocido la verdades como catedrales, cómo va a reconocer el 94,9% en favor al "Sí" a la Independencia de Catalunya. Para ello, quizás se escude en aquéllo del índice de participación. Perfecto, pero si es ese su único argumento (el que al menos se necesita un 50%), al menos debería reconocer que, según ese porcentaje, no habría Constitución, Estatuto de Gernika, ingreso en la OTAN, Tratado de Maastricht, o elección de más de un presidente de Gobierno. Es más, opino que no habría ni Borbones en la Zarzuela viviendo a la chepa de todos los ciudadanos como (creo que) debería opinar él.
Y esto, simplemente, por lógica coherencia con -entre otros- Blas Infante. ¿Y éste qué es, socialista o "Sociata"? Va a ser que, sin duda, optaremos por la "b".
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