El Ayuntamiento de Bilbao ha quitado este pasado jueves las canastas del Parque de Doña Casilda, después de que un Juzgado de Bilbao haya obligado a hacerlo a causa de los ruidos.Un grupo de vecinos de la "humilde" Comunidad Lezama Leguizamon, situada sobre las canchas, había denunciado que el peloteo del balón superaba los decibelios permitidos por la noche.
Como no podía ser de otra manera, el Juzgado les ha dado la razón y el Ayuntamiento de Bilbao ha retirado las "molestas" canastas.
La película es la siguiente: se les pide a nuestros jóvenes que no hagan botellón, litros, katxis, etc... pues bien... hacen deporte... y esto, parece fastidiar a la típica familia "negurítica" que tiene la "desgracia" de tener un "pisazo" con vistas al parque y que se niega a que les realizan las pertinentes mediciones de ruídos (en Db.) por parte de la Autoridad competente (Policía Municipal).
Bien... la gestión sobre esa Área la tiene un "señorito" de Rekalde (el edil de IU, Jon Sustatxa) que ha llegado a aparcar su coche en La Casilla y cuando se lo ha llegado a retirar la grúa municipal... pues ha llegado a salir con la camiseta sudada de gimnasio para decir que estaba "trabajando" y para meter caña al guardia municipal de turno que... lo único que hacía era su trabajo... así sin más. Y no es que lo diga yo: pónganse en contacto con los sindicatos de la Policía Municipal de Bilbao y pregúntenles si yo me estoy inventando algo.
Más información sobre ese señor de la perilla: meses después de pulirse NUESTRA PASTA en percebes y Moët en no se qué Congreso del Deporte, se confabula con la nacionalista Diputada Foral Josune Ariztondo para pedir disculpas el mismo día y a la misma hora.... una en las Juntas Generales y el otro (a puerta cerrada) en el Ayuntamiento de Bilbao. Disculpas aceptadas pero... pantomima estratégica "pillada".
Por último, en el Parque de Doña Casilda, también existe una nueva calle dedicada a Sánchez Mazas por acuerdo del Ayuntamiento en total incumplimiento de la legalidad vigente en lo que a la Legislación de Memoria Histórica implica. Éste, además de ser un ideólogo falangista, no tengo constancia de que haya sido otra cosa más que un cronista que llegó a ensalzar a Musolini.
Solución: poner las canastas en la zona de este falangista y hacer botar los balones ahí... Y...¿por qué? porque dá igual molestar a en una calle de un falangista que molestar a otros de otra calle... o no?
Y, de imperativo legal, es retirar la calle con la que se homenajea al que ilustro en la fotografía a la izquierda en la imagen (pero no ideológicamente) del general golpista Franco. Y, esto tampoco lo digo yo. Lo dice la vigente Ley de Memoria Histórica que es, de obligado cumplimiento y, en este caso, no vale eso de edificios arquitectónicamente peculiares y protegidos como se esgrimió con lo de los escudos pre-constitucionales en las sedes de la Agencia Tributaria de la Plaza Elíptica o en la de Correos en la Alameda de Urkijo.
1 comentario:
No vamos a permitir que quiten, no sólo unas simples canastas, sino algo único que desde el año 93 une a mucha gente.Quien sabe de qué estoy hablando, y creo que somos muchos, tomaremos las medidas oportunas, sean legales o no, contra la comunidad de vecinos demandante, el Ayuntamiento o cualquiera que se interponga entre nosotros y un derecho adquirido durante tantos años. No nos conformamos con que cambien de ubicación las canastas sólo porque a unos vecinos aburguesados y remilgados les moleste nuestra presencia. Que se gasten su maldito dinero capitalista en insonorizar sus pisos, así sus pensamientos vanales y pecuniarios revotarán sobre sus nimias conciencias.
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