A las 19:45de hoy viernes 18 de enero de 2008, a la salida de El Corte Inglés en la bilbaína Gran Vía, se encontraban unas personas perfectamente identificadas como miembros de "UPD" (Unión Progreso y Democracia) repartiendo unas octavillas rosas del acto de presentación de candidaturas.
Con una fotografía monocrómica de Rosa Díez en la parte izquierda del papelito satinado (voy a guardar la "papanatxa" o pasquín), se anuncia que el sábado 26 de enero, a las 12 h. tendrá lugar dicha presentación en el Teatro Arriaga de Bilbao. Bien, a la salida de ese Centro comercial, me han dado uno de esos papelitos.
Al ver de qué se trataba, he hecho una bolita y, ante la falta de papelera, lo he arrojado al suelo (mala conducta ciudadana... lo reconozco). Me he dado cuenta que aún existen peores conductas ciudadanas ya que ha sido entonces cuando un individuo me ha venido a espetar que, al parecer no era yo un demócrata por el mero hecho de tirar ese panfletillo fascista. Claro! tampoco voy a un solarium, ni aprendo inglés en CCC, tampoco hago cursos de guitarra en CEAC.
De igual forma no frecuento restaurantes vegetarianos ni soy cliente de Orange. Tampoco necesito ningún tratamiento capilar de los que anuncia el locutor anti-Athletic de Salinas (en La Sexta) con la "rayada" del Tiki-Taka de las pelotas.
Con esto quiero decir que eso de dar propaganda a la salida de Centros Comerciales o en las bocas de metro o en Termibús, no me parece ni bien ni mal ni todo lo contrario. También es cierto que nunca se me ha enfrentado un repartidor de esos diciéndome que por que "paso" de la publicidad que me ofrece.
Me tengo por una persona relativamente educada pero he tenido que oír lo mío. Es esta una gente que se escuda en tener un par de "maromos" y una furgoneta y un "Passat" de la Ertzaintza detrás para adoptar actitudes tan chulescas. Y es que, de presuntas víctimas, han pasado a auténticos fascistas.
Cojones, tampoco me faltan. Entre que iba con una señora de relativa edad y entre que tenía prisa he dejado pasar el incidente sin más. Evidentemente, si me pillan sólo, hubiése tenido un par de palabras con esos extremistas. Vamos, que me lío a hostias y me quedo sólo. Quizás los municipales que estaban "auyentando" a los peruanos del "top manta", (Ramoncín y Bautista así se lo han exigido a Azkuna) me hubiesen echado un cable.
Si, con el mismo derecho, me pongo a dar octavillas relativas al proceso 18/1998 en El Corte Inglés de la madrileña calle Princesa, ¿qué me hubiese ocurrido?. Seguramente no estaría escribiendo esto ya que en la UVI de La Paz no se permiten dispositivos electrónicos como ordenadores portátiles o teléfonos celulares.
Yo no incito a nada ni a nadie pero, la impresentable de Rosa Díez, el listomari y graciosillo Pombo, o el mejor exponente de la filosofía del buen vivir -Savater- ni sus secuaces, ni sus guardaespaldas ni, absolutamente nadie, puede venir a mi casa -a mi ciudad- a crisparme. Los socialistas darán rosas (o fragancias si es el PSC).
Rosa Díez -precismente- andaba no hace mucho dándo flores. Los del PP pueden dar lo que quieran... y... así... absolutamente todos los partidos políticos. Yo tengo la plena libertad de cogerlo o dejarlo sin que un fascista ponga en duda mi carácter democrático. Me está pidiendo el cuerpo ir al Arriaga y montarles el mismo "pollo" pero, tengo cosas más interesantes que hacer el sábado que ir a ver la puesta en escena de gentes que viven por y para el victimísmo. Así que, le pueden dar por dónde amargan los pepinos, es decir, por el culo. Y ello, por fascistas.
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